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Es innegable que la situación actual ha hecho que el mercado laboral se encuentre en una etapa muy complicada. La oferta de empleos ha disminuido significativamente en los últimos años a la vez que ha aumentado mucho la demanda de puestos de trabajo. Además, se ha incrementado la oferta formativa, por lo que los/as candidatos/as a un puesto de trabajo son más y están mejor preparados/as que nunca. Por todo esto, la ilusión de encontrar un trabajo puede llegar a convertirse en un difícil reto, y enfrentarnos a una entrevista de trabajo puede ser un momento que nos genere grandes niveles de ansiedad, lo que nos dificultará alcanzar nuestro objetivo.

No obstante, una entrevista de trabajo es una oportunidad de causar una excelente impresión que haga que seamos el/la candidato/a seleccionado/a. ¿Has recibido una llamada telefónica o un correo electrónico citándote para una entrevista? Enhorabuena, este es el primer paso para lograr el «trabajo de tus sueños». Quiero compartir contigo una serie de útiles consejos para que llegues con una gran seguridad, demuestres todas tus habilidades y aptitudes, y realices con éxito esa entrevista de trabajo. Existen pautas comprobadas para ir más allá de la entrevista típica y que puedas posicionarte por delante del resto de candidatos/as que optan a ese puesto de trabajo.

Te aconsejo:

  • Prepara la entrevista: recopila información sobre la empresa y el puesto de trabajo al que optas.
  • Conócete a tí mismo/a.
  • Aprende tu Currículum Vitae de memoria, del derecho y del revés. Es la herramienta principal en la que se va a basar tu entrevista, datos, fechas, puestos, empresas, funciones, etc.
  • Estate preparado/a y seguro/a: realizar una entrevista de trabajo es motivo suficiente para poner a cualquiera nervioso/a. Practicar la entrevista es una de las claves para que disminuyan los niveles de ansiedad. Coge una hoja y escribe porqué estás interesado/a en esta oportunidad laboral y porqué eres la persona más preparada para el puesto. Ensaya delante del espejo, con un familiar o amigo/a.
  • Está demostrado que las personas nos formamos una primera impresión sobre alguien en menos de un segundo. Debes de ir muy bien vestido/a. Es algo que puede hacer que el entrevistador/a aplique un sesgos positivo o negativo hacia el resto de la entrevista. Viste de forma profesional. Además indica un gran interés por el puesto.
  • Sé puntual. Llegar tarde anula prácticamente cualquier oportunidad de éxito. Llega al lugar con 15 minutos de antelación, lo que permitirá mantener la calma, habituarse al lugar y anticiparse a posibles imprevistos.
  • Lleva una copia de tu Currículum Vitae, aunque no te la hayan solicitado.
  • Apaga tu teléfono móvil, algo que parece obvio pero que se nos puede olvidar con los nervios.
  • En el caso de que haya que rellenar algún impreso hazlo de forma clara, ordenada y precisa, que cause una buena impresión.
  • Utiliza un lenguaje y expresión adecuados, además de modular los aspectos para verbales (ritmo, entonación, dicción, volumen, etc,)
  • Cuida tu lenguaje no verbal, que tiene cada vez más importancia dentro de la sociedad actual y que le proporciona información de gran importancia al entrevistador/a. Practica delante de un espejo los días previos. Aspectos como una postura cómoda pero abierta, sonreír, asentir con la cabeza, acompañar las palabras con las manos, mirar a los ojos de la persona que realiza la entrevista, etc.
  • Muestra entusiasmo respecto al puesto y la empresa. Responde de forma positiva a las preguntas que te realizan siempre que sea posible.
  • Muestra énfasis en tus logros y talentos. Puedes transmitirlo nombrando los éxitos alcanzados en otras empresas, las tareas específicas, aportaciones que has realizado, etc.
  • Prepara tus habilidades, fortalezas, destrezas, cualidades y puntos a favor, destacándolos en tus respuestas. Ensaya delante de alguien,  del espejo o grábate. Repasa tus puntos débiles para minimizarlos con alternativas de solución y sin mentir ni hacer respuestas inverosímiles.
  • Muéstrate motivado y con determinación para el puesto, pero sin excesos. Puedes transmitir que una vez adaptado, tienes herramientas que han demostrado ser eficaces para realizar aportaciones a corto plazo.
  • Responde a las preguntas con sinceridad, de forma directa y hablando en positivo. Si tienes que explicar experiencias negativas, no mientas, destaca qué has aprendido de ellas y por qué no cometerías de nuevo vez el mismo error.
  • Responde a la pregunta que te han realizado. No te vayas por las ramas, lo notan. Si no estás seguro de la pregunta, solicita que te la repitan.
  • Responde forma organizada, clara y ordenada. Es mejor una respuesta breve y concisa que una respuesta larga y difusa.
  • Si te hacen preguntas difíciles, que están diseñadas para ver cómo reaccionas, responde de forma natural y cómoda, y esto se hace practicando en casa. Si una pregunta te pilla por sorpresa, tómate unos segundos de pausa, respira y responde.
  • Al finalizar la entrevista, o durante su desarrollo, si se da la oportunidad, realiza preguntas, que denotará tu interés por el puesto de trabajo.
  • Si te preguntan porqué quieres cambiar de trabajo, hazlo con positividad, sin ser negativo con tu empresa: quieres más responsabilidades, más retos,  más oportunidades, etc. Si te han despedido, destaca lo que has aprendido de la experiencia y cómo te ha ayudado a mejorar en tu profesionalidad.
  • Deja claro que el puesto para el que te están entrevistando es tu objetivo principal. Haz que el entrevistador/a perciba que este trabajo es tu objetivo laboral. Las empresas no quieren a alguien que transmita inestabilidad o que en X tiempo va a buscar otra cosa.
  • Lo normal es que te den la opción de plantear preguntas. No le quites importancia a este momento, se trata de una gran oportunidad de cerrar adecuadamente la entrevista y demostrar tu interés. Una entrevista implica un intercambio de información. Puedes hacer preguntas sobre el proceso de selección, el cargo y la empresa. Llévalas preparadas.

Te desaconsejo:

  • Una mala apariencia personal, falta de interés, las críticas, no mirar a los ojos, tratar al entrevistador como un amigo/a, llegar tarde, una mala expresión, ser autoritario/agresivo y la falta de educación.
  • Discutir el sueldo o los incentivos. El salario es un tema delicado que suele tratarse al finalizar la entrevista o en una segunda, si la hay. Si no te hablan de las condiciones, formula la pregunta de forma clara y con una actitud abierta, no exigente.
  • Responder a las preguntas con un simple “sí” o “no”. Aprovecha cada pregunta para venderte, para aportar cualidades extra, para ofrecer una valor añadido.
  • Divagar. Una cosa es querer meter habilidades y otra irse por las ramas. Responde a las preguntas de forma clara y breve. Si te indican que cuentes algo sobre ti, emite una respuesta de uno o dos minutos resaltando tus logros personales y profesionales.
  • Realizar comentarios despectivos sobre tus superiores, tus compañeros de trabajo y tu empresa anterior.

He recopilado para ti una serie de pautas y consejos que funcionan para ayudarte durante la entrevista, realizar un proceso de selección de personal con las mejores garantías y ayudarte a conseguir ese trabajo con el que sueñas. Si consideras que es el momento de pedir ayuda para mejorar tus entrevistas de trabajo o tienes algún otro problema, recuerda que puedo ayudarte.

David Gómez – Psicólogo

Consulta de psicología presencial en Valladolid y atención psicológica online.